VELOCIDAD DE ESCAPE

2007-04-13

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MIS RECETAS PARA LA PRODUCTIVIDAD

Recientemente el FMI ha presentado un informe según el cual España tiene una de las tasas de productividad más bajas de Europa y recomienda desproteger mercados como el energético y el de telecomunicaciones.

Miren que no soy muy dado a estar de acuerdo con el FMI, básicamente porque desde hace bastantes años perdió de vista su objetivo fundacional -y sino lean libros como los del premio nobel Joseph E. Stiglitz- pero en este caso no puedo evitar darles la razón.

En mis cortos conocimientos de economía entiendo que la productividad es el resultado de un cociente en el que el divisor se relaciona de alguna manera con el número de horas trabajadas, de modo que, a mayor número de horas trabajadas, menor productividad. Y en el caso de España es flagrante. Según estadísticas Europeas España tiene el dudoso honor de ser el país con mayor número de horas trabajadas al año y menor número de dias festivos al año - recuérdenlo la próxima vez que se monte la polémica por un megapuente - con lo cual es más que evidente por dónde hay que meter la tijera.

Como solamente puedo hablar a ciencia cierta de lo que conozco de primera mano, relato lo que en mi empresa pasa. Y lo que acontence es ni más ni menos que en vez de trabajar la gente se toca los huevos durante todo el dia para pegar el apretón a última hora. Pongamos por caso la mayor parte de directores de departamento, que suelen entrar una hora más tarde que los demás, se van a tomar un café al bar a media mañana, se tiran 4 horas de comida, aparecen a las 5 de la tarde y luego están hasta las 10 en su despacho. Evidentemente esas son las horas en las que el gran jefe les ve, y está contento con ello pues pertenece a la escuela del "estar presente" en vez de la escuela del "lograr los objetivos". Productividad de mierda, dividida por muchas horas, resultado: rendimiento cero.

Y hablaría de las directoras de departamento que se van a media mañana a "hacer unas gestiones" y luego aparecen por la tarde con una bolsa de Zara si no fuera porque me llamarían machista. Luego tienen la desvergüenza de echar la bronca a los curritos que cumplen su horario a piñon, sin parar ni para un mísero café, cuando si calcularamos su productividad sería estratosférica. Se llega al punto de rechazar a candidatos para un ascenso simplemente porque "cumplen a rajatabla su horario".

Como no todo se va a basar en las horas trabajadas, también encuentro algo que me toca bastante los cojones, y es el no solo deficiente, sino escandalosamente escaso conocimiento y aprovechamiento que de las nuevas tecnologías se hace. Los usuarios son, salvo muy contadas excepciones, unos auténticos bultos sospechosos, paquetes inutiles en lo que a utilización de Software se refiere.
Vamos a ver, si solamente usas una puta suite ofimática en todo el puto dia -sea esta cual sea, no nos pongamos talibanes- ¿qué demonios te impide ser el tipo/tipa más eficiente y absolutamente dominador de semejante herramienta?. Pues debe de haber algún tipo de tara genética oigan, porque he perdido ya las veces que me han dicho aquello de "no veo el control" cuando les dices que pulsen "Control + Algo" y me los imagino mirando la pantalla como locos buscando un botón que ponga "control". O que tenga que explicar algo tan sencillo como insertar un salto de seccion a un documento para separar formatos de página, o cómo abrir un libro de Excel desde Access (¡no sabía que eso se pudiera hacer!), o como guardar una página web en el disco duro, y qué me van a contar de cómo imprimirla directamente desde el navegador o qué demonios es eso de combinar correspondencia. Como saben, todos estos procedimientos ignotos solo accesibles para los más arcanos miembros de las sociedades secretas del uso avanzadísimo de la ofimática. Eso sin contarles que todas las semanas le tengo que explicar a alguien que un lector de CD solamente sirve para leer CD y que por mucha voluntad que le pongan y cariño que le den no van a conseguir que lea DVD y mucho menos que los grabe.

Y claro, cuando un usuario te hace una presentación de powerpoint, metiendo unas 20 imágenes de 10 megas y lo manda por Email a toda la empresa encima tenemos que aguantar que diga que el correo no funciona y que su equipo -un dual con 2 GB de Ram - es una mierda porque va muy lento. No se ustedes, pero aquí se sustituye agilidad mental e inteligencia con potencia de CPU y memoria Ram. Y nos va muy mal, se lo aseguro.

Así que cuando oigo hablar de la Web 2.0 y cómo esta pùede aumentar la productividad me da la risa floja. Web 2.0 con Usuarios -2.0 como mezclar agua y aceite. No se obtiene nada útil.

Ah, y los del FMI también piden flexibilizar o desregular dos mercados, el de telecomunicaciones y el mercado laboral. Totalmente de acuerdo con el primero, pero mucho más con el segundo.
No se imaginan hasta qué punto. En mi empresa estamos viviendo una paradoja cuántica, al igual que el gato de Schrodinger, que no se sabe si está vivo o muerto, o más bien está vivo y muerto al mismo tiempo, en mi empresa sobra y falta gente al mismo tiempo.

Así que totalmente de acuerdo en lo del mercado laboral, y sino, recuerden las recomendaciones al respecto que sobre el mismo tema le hice al anterior presidente de la patronal española, y que aprovecho para repetir al nuevo presidente del empresariado español, el señor Gerardo Díaz Ferrán.

IDEAS PARA CUEVAS
Esto no es una entrada con sugerencias de decoración para cubiles de informáticos.
Eso será otro día, o quizás en otra bitácora. Aunque adelanto que una escopeta de cañones recortados queda muy bien.
Pero no nos adelantemos a los acontecimientos.

Hoy me atrevo muy humildemente a sugerir algunas ideas que podrían ser tomadas en consideración para ayudar a nuestro insigne presidente de la confederación empresarial en su quijotesca lucha contra los molinos de la rigidez laboral. Nadie ayuda a este santo varón en su cruzada por la conversión de españa en un país lider en productividad que evita las deslocalizaciónes merced a su comprometida mano de obra.

Desde aquí te lo digo, admirado Jose María, tus prédicas no caen en el desierto. Yo te escucho. Te escucho y me comprometo a luchar con todas mis fuerzas para que tus avanzadas ideas no caigan en saco roto.
Es más, añado a tus directrices (que sólo un desalmado llamaría "recetas") mis humildes reflexiones que tratan de llegar a dónde tú, por cortesía o diplomacia, tan preocupado por no herir, no te atreviste siquiera a insinuar.

Pides Flexibilidad laboral. Por supuesto, flexibilidad a ultranza. Flexibilidad radical. Una durísima flexibilidad caiga sobre todos nosotros. Fuera los inútiles, los pelotilleros, los levantalevitas y los vagos. Que sólo los más aptos queden en sus puestos. Ningún español de buena fe debería permitir que en su empresa, en su lugar de trabajo, medren personajes que hacen un flaco favor a la empresa española y por ende, a España. Gente que no sabe que el botón con la impresora sirve para imprimir, gente que se tira media jornada laboral en la cafetería y la otra media hablando por los pasillos con un papel en la mano, gente que usa los recursos de la empresa para imprimir fotos de los niños y mandarse gilipolleces por email, gente que en suma, no suponen sino una pesada rémora para la productividad de la empresa Española.

Pongo ejemplos.

Aquel Departamento Comercial que consta de 10 personas de las cuales hay un Director Comercial, un Director de Ventas, dos Adjuntos (uno a la Dirección Comercial y otro a la de Ventas), un Jefe de Comerciales, un Jefe de Ventas, un responsable de Coordinación Comercial y dos Comerciales. De los dos comerciales, uno vendería frigoríficos a un esquimal y el otro es un paquete, un bulto sospechoso, la encarnación del inútil en la especie, el epítome de la nulidad intelectual.
¡Caiga una Durísima Flexibilidad sobre ellos! ¡Viva la Meritocracia! ¡Dejemos al buen comercial que desempeñe su trabajo y fuera todos los demás!

Aquel Departamento de Informática compuesto de un Director, un Analista-Funcional, un Analista-Orgánico, un Jefe de Proyectos, un jefe de Sistemas, un Coordinador, un responsable de compras, un programador, un diseñador y un técnico de sistemas.
¡Caiga una Durísima Flexibilidad sobre ellos! ¡Viva la Meritocracia! ¡Dejemos al programador, al diseñador y al técnico de sistemas que al fin y al cabo son los que hacen todo el trabajo y fuera todos los demás!

Admirado Jose María, pides también, moderación salarial. Y las lágrimas fluyen a mis ojos imaginando el día en que se cumplan tus deseos (que hago míos). Imaginando esa Arcadia Feliz en la que a cada cual se le dá según su necesidad y según su desempeño.
Pero mi mirada y mi corazón se enturbian cuando veo empleados que cobran más de tres mil euros (3.000 ?) por soltar cuatro frases de libro de "nuevo Gurú del Management" en las reuniones con el comercial, el programador, el técnico de sistemas, o el diseñador para posteriormente pasarles todo el trabajo después de adormecerlos con reuniones maratonianas hablando de lo divino y lo humano.
Aquellos Vampiros que sangran las venas de la empresa Española ocupando puestos de Responsabilidad en los que la responsabilidad brilla por su ausencia. Directores y directorcillos, Adjuntos, subjuntos y conjuntos; jefes, coordinadores y demás ralea que sangran los beneficios que la empresa podría reinvertir en mejorar su competitividad y pasan su vida perdiendo su tiempo y el de los demás.
¡Caiga una Inmoderada moderación sobre ellos! ¡Viva el recorte salarial! ¡Que su sueldo corresponda a su trabajo! ¡Viva la mejora de la productividad!

Admirado Jose María, adviertes que estas avanzadas medidas son un modo de evitar la deslocalización. No temas, amigo, hermano. Yo te digo: la deslocalización es buena. Pero hay que tener el valor de un hombre con visión (como tú, admirado Jose María) y un pulso de hierro para tomar la decisión correcta: agarrar a la citada recua de vampiros e ineficientes que sumen a la empresa Española en un marasmo y deslocalizarlos a tomar por el culo a todos.

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