VELOCIDAD DE ESCAPE

2006-06-22

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MALA CONCIENCIA

Y la verdad es que no me había levantado hoy de buen humor. Realmente tampoco es que me hubiera acostado como unas castañuelas, como suele ser usual, o me acuesto tan cansado que no puedo dormir o me acuesto tan cabreado que no puedo dormir.

El caso es buscar excusas para no dormir. Que como decía el poeta: "dormir es como estar muerto, y eso me parece tan cristiano....".
Abreviando, que me había levantado de aquella manera y según caminaba hacia la oficina me cruzo con un antiguo compañero del Instituto de Secundaria de aquellos de matrícula en todas las asignaturas. También en la facultad fué de los de matrícula en todas las asignaturas. Tuve bastante contacto con él dado que vivía en mi mismo barrio y recuerdo haber jugado al tenis con él en muchas ocasiones. Sin embargo su carácter claramente propenso a la angustia y un nivel de autoexigencia rayano en el paroxismo inculcado por su padre impidieron que la amistad fuera muy profunda. Siempre he sido de los que disfrutaban estudiando por el solo hecho de aprender, no por calificaciones ni motivos externos, y sufrir mientras se aprende me ha parecido toda mi vida un acto de supremo masoquismo moral. Soy de los que gustan de autoflagelarse como Quasar suele decir, siempre pensando en las cosas que me dan asco en vez de en las que no me lo dan, pero no hasta estos extremos.

Él no me ha visto a mí. Sin embargo cuando yo le he visto a él he dudado si realmente se trataba de la misma persona. Estaba prácticamente en los huesos, demacrado, los pómulos y los ojos salientes, el pelo ralo o casi inexistente y una expresión angustiosa en la mirada.
Sé, porque me lo contó en la anterior ocasión que nos vimos, que lleva largos años con problemas médicos que no aciertan a diagnosticar, y por conocidos comunes sabía de su progresivo deterioro, pero al verle esta mañana he dudado si era él.
En mi opinión desde el fallecimiento de su padre una mala conciencia (no se llevaban bien, amor-odio) se ha llevado por delante su salud.

Y entonces de repente se me ha quitado la mala leche y ha sido sustituida paulatinamente por un pequeño sentimiento de culpa, un especie de mala conciencia por alegrarme de no ser él.

Estupidiario y otras cosas | jomaweb | 2 Comentarios | Enlace