VELOCIDAD DE ESCAPE
Inicio > Historias > TRAS EL OBLIGADO PARÓN
TRAS EL OBLIGADO PARÓN
Muchas y muy variadas ideas cruzan por tu cabeza tras pasar casi un un mes en absoluto reposo. Cuando el frenético deambular diario cesa merced al parón obligatorio decretado por las necesidades evidentes de recuperación física, sobreviene primero una etapa de terror. La sola idea de pasar un mes sin actividad se vive de manera angustiosa. No es lo mismo cuando uno está de vacaciones que al fin y al cabo se ve como algo justo y necesario. En este caso la perspectiva de pasar un mes en dique seco se torna aterradora. Máxime si te prohiben por al menos dos o tres meses la realización de cualquier actividad violenta, entiéndase Aikido y por supuesto Thai Boxing. Se me olvidó preguntarle al doctor si hacer el amor (vulgo follar) se consideraba actividad violenta dadas las marcas y secuelas a que puede dar lugar. Sin embargo tras un poco de reflexión uno trata de hacer de la necesidad virtud y realiza un pequeño esbozo de lo que puede hacer pese a tener un arnés en la espalda y los brazos abiertos como un águila a punto de alzar el vuelo.Leer, pasear, ver películas, estudiar...
La lista se circunscribe como se podrá ver a actividades muy peligrosas todas ellas para la salud. Al menos la mental.
Los hechos se encargan de desmentir las ideas que uno pudiera tener, por más peregrinas que puedan estas ser. Leer, la verdad, lo que se dice leer, he leido dos libros escasos. "Made in China" de manuel Ollé y "La tierra es plana" de Thomas Friedman. Empezar y comprar, es otra cosa. Alcancé de nuevo el colapso en mi casa y no ha quedado más remedio que realizar una nueva criba de los que serán condenados al ostracismo del sótano. Ejemplar servicio el de la tienda On-Line Cyberdark. Pedir los libros un jueves por la tarde y tenerlos en casa a primera hora de la mañana del dia siguiente cuando no puedes ir de tiendas como es mi caso me parece algo realmente fantástico y de lo que deberían aprender muchos. Totalmente recomendable. Lástima que su campo de acción se restrinja a la literatura de género. Empezar también empecé unos cuantos. Como siempre, son más los que empiezo que los que acabo. Y en cualquier caso, descartando los 15 primeros días que estuve dopado con calmantes, no me cabe sino constatar que mi incapacidad lectora se debe a razones propias de mis apetencias e intereses más que a la falta de tiempo, eterna razón a la que siempre le endilgaba el muerto de la escasez de lecturas. Pues ahora lo sé. No leo porque no me da la gana. O porque no encuentro nada que merezca la pena. Pero ya no me oiréis (leeréis) más quejas acerca de que la falta de tiempo me aparta del sagrado placer de la lectura. Como mucho la falta de tiempo me hará tener la percepción subjetiva de que si dispusiera de más leería. Pero sabré que no es cierto. De los dos mencionados libros el único que leí del tirón fué el ensayo sobre la globalización de Friedman.
Por cierto, en este punto me gustaría hacer un agradecimiento muy especial para todas aquellas personas que me habéis mandado libros o CDs de mi lista de deseos de Amazon.co.uk. No sólo habéis colmado mis deseos materiales de posesión de artículos de consumo sino que habéis ayudado sin duda ninguna a mantener un adecuado tono anímico (vulgo alegría) del cual tan necesitado estuve en estas fechas. Ya os lo he agradecido personalmente pero es de obligado cumplimiento dar reconocimiento público a estos detalles. A todos, mil gracias. Gracias también a todos los que llamaron para interesarse por mi estado y darme ánimos, especialmente Dalla y Liskul.
Volviendo al tema. Otra de las cosas que permite una larga época sin el frenesí diario es la quietud en el pensamiento y la posibilidad de reflexionar. Pasada la primera etapa de las drogas absolutamente necesarias para calmar el dolor que tienen como curioso efecto secundario el embotamiento mental, podemos dedicar gran parte del tiempo a explorar todos los estados anímicos posibles. Desde la cólera a la desesperación, no se queda ninguno sin experimentar. Todos tienen su oportunidad. Al final, en algunos casos, se llega a conclusiones válidas, en otros, al menos a la certeza de que no sirve para nada el esfuerzo de sentir preocupación por determinados temas a los que anteriormente dábamos importancia.
Conclusiones a las que uno llega:
En el terreno profesional, dado que mi historia laboral, por cosas del azar, el destino, o váyanse ustedes a saber porqué, me ha llevado a las nuevas tecnologías, y más concretamente me han hecho migrar desde una posición de programador hacia una situación de análisis, dirección y gestión de proyectos, no queda más remedio que ir olvidando la faceta de programador puro y duro (que los hechos ya me han obligado a olvidar) y adquirir nuevas habilidades en la gestión de proyecto y en el diseño de software. Más que una reorientación de mi trabajo lo que me planteo es la absoluta necesidad de aceptar (dirigir) el cambio que se ha producido en mi perfil sin lamentar aquellos tiempos pretendidamente felices del programador bisoño que era hace unos años. Urge formarse y actualizar conocimientos sobre UML, programación orientada a aspectos, ingeniería de software, dirección de equipos de trabajo, gestión de proyectos de software, etcétera. En definitiva, irme olvidando del Visual Studio y usar más el Microsoft Project.
Por este lado solo se me plantea una duda. Tengo que reconocer que la situación ha derivado de una manera casi caótica, sin control, sin dirección, hacia donde ahora me encuentro. Pero este reajuste en mi perfil profesional implica la necesidad de reestructuración de mi departamento y la incorporación de al menos una persona que supla el abandono paulatino de mis funciones de programador. Este es el principal escollo. ¿serán los directivos receptivos y comprensivos ante esta nueva situación provocada ni más ni menos por el crecimiento de la empresa?
Si no es así mucho me temo que una de las opciones válidas (casi la única) es la búsqueda de otro empleador. Como dice el refrán: "El que no es empresario es mercenario".
Estupefacción es otra de las emociones que he sentido en este periodo. No quiere decir que no la sintiera antes, pero en este caso de manera menos tangencial y más directa. Ocurre que tras el consabido tropezón sobreviene la obligatoria y necesaria visita al traumatólogo. De momento de la seguridad social, dado que los mercenarios, salvo que seamos de alto standing, no podemos permitirnos según qué lujos. Y me sume en la perplejidad el traumatólogo de perfil "democrático-participativo" que me toca en suerte.
En Urgencias, a los pocos momentos de la caída, el doctor que me atiende me dice:
-Vendaje en Ocho, inmovilización, calmantes, 10 días y vida completamente normal. Tienes que pensarte si te operas, aunque esto solo se opera en un 10 por ciento de los casos.
-¿Y qué razones hay para pertenecer a ese 10 por ciento?
-Pues que realices algún tipo de deporte de competición que requiera que lo tengas todo perfecto.
Claro, y como realizo deportes de alta competición me están atendiendo unos mediquitos bisoños que hacen prácticas en un centro de urgencias de la seguridad social, pienso para mí, pero me callo. En cambio pregunto:
-Vale, pero..¿podré realizar artes marciales si no me opero?
-Si es sin competir no hay problema.
Vale. Con eso me quedo. A los 10 días paso a visitar (a que me visiten, por mor de la precisión) al traumatólogo de zona que me corresponde.
Me ve, mira las radiografías, me mira de arriba abajo de nuevo, y escupe:
-¿Quién demonios te ha puesto ese vendaje?, Vendajes fuera, ponte cabestrillo, un mes de baja, nada de actividades violentas, y listo.
No dudo que la medicina sea una de las bellas artes, pero semejante falta de unanimidad en el criterio diagnóstico me sume en una absoluta perplejidad, máxime cuando se pretende presentar a la medicina como una disciplina basada en métodos científicos.
-Estooo, el "doctor" que me atendió en urgencias me dijo que me pensara si me quería operar.
-Pues opérate.
-¿Pero cuál es la alternativa?
-No operarse.
En este momento dudo si el Traumatólogo ha estudiado medicina o Lógica Booleana en un curso por correspondencia.
-¿usted qué me recomienda?
-Lo que tú veas.
Como tengo claro que casi siempre lo importante es hacer las preguntas correctas más que tener las respuestas correctas, reformulo la cuestión:
-Lo que quiero decirle es si existe alguna ventaja entre las opciones disponibles.
-No.
-Es que me gustaría seguir haciendo Aikido y Thai Boxing.
-Pues opérate.
-En ese caso ¿cuál es el proceso?
-Anestesia total, inserción de agujas y placas metálicas en el hombro, coser ligamentos. Dos meses de baja, rehabilitación.
-Ya, pero es que no lo hago en plan profesional, sino como afición, y me dijo el chico de urgencias que en ese caso no hacía falta.
-Pues no te operes.
No dudo que la democracia sea el menos malo de los sistemas, pero este estilo plebiscitario aplicado a la traumatología me saca de quicio. No sé si es profesionalidad o dejadez. No tengo gran estima el pasar por un quirófano salvo que el beneficio sea evidente, así que insisto en encontrar razones de peso para hacerlo.
-Hablemos claro. ¿qué consecuencias tiene el que no me opere?
-Ninguna.
-Joder, ¿y si me opero?
El "doctor" capta el tono de la pregunta, o me ve la cara de mala hostia, o decide que se va a ganar el sueldo hoy conmigo y responde:
- Vamos a ver, que esto no es un cancer terminal, que es un puñetero ligamento. Si fuera un cancer te diria que te operaras pero como no lo es, y hay gente que sin clavícula hace una vida completamente normal, pues te digo que la decisión es tuya.
Mentalmente añado la clavícula a las otras dos partes del cuerpo humano absolutamente inútiles que se pueden quitar sin problema porque no sirven para nada: El bazo y el prepucio.
- O sea que puedo vivir sin problema sin ese dichoso ligamento.
- claro, hombre.
- Cambiemos un poco el foco. En unos años tendré algún tipo de secuela.
- Naaada hombre, probablemente molestias y en todo caso un poco de artrosis en el hombro, pero eso solo el tiempo lo dirá.
Así quedan las cosas en el terreno corporal.
En el terreno mental, pues me he permitido el lujo de tomarme las cosas con otra perspectiva. Sorpresas de todo tipo con los amigos y los que no lo son. Muy agradables sorpresas con mis amigos verdaderos. Aquellos que están ahí cuando los necesitas. Al menos con algunos de ellos. No tan agradables con otros, pero eso era de esperar, y muy agradabilísimas sorpresas con gente que no parecían ser más que simples conocidos y han ascendido meteóricamente a la categoría de amigos entrañables y atentos.
En el terreno personal simplemente consignar el descubrimiento muy placentero de cierta persona que me permite dar una prórroga a la idea de que el otro género merece la pena. Como siempre, todo depende de la perspectiva y de la aproximación al objeto. Y este periodo ha permitido una aproximación y una perspectiva muy cercanas. Gracias por tus visitas, tus atenciones, tu aliento y tu alegría.
Entre las circunstancias agridulces, de las cuales uno no sabe si quedarse con lo bueno o con lo malo, una llamada del pasado. Cierta persona que se encargó de hacer que pasara la peor época de mi vida en términos personales, llama por teléfono para pedir disculpas "por todo el daño que te he hecho en la vida". Pues vale, pues me alegro, pues que si existe una justicia inmanente en este mundo (cosa asombrosamente refutada por los hechos diariamente) solamente deseo que la vida te dé lo que te mereces. Ni bueno, ni malo, solamente lo que te mereces.
Por último, y como se suele decir, no por ello menos importante, gracias a mi familia. Cuando uno no tiene la capacidad de algo tan sencillo como ponerse los pantalones o los calcetines por sí mismo es cuando más se agradece que estén ahí. Muchas gracias.
Poca cosa más.
Sigan conectados.
Estupidiario y otras cosas | jomaweb | 18 Comentarios | Enlace
Referencias (TrackBacks)
URL de trackback de esta historia http://jomaweb.blogalia.com//trackbacks/37601
Comentarios
1 |
|
||
Joma, no te puedes imaginar como te comprendo... y creeme cuando te digo que la cosas pueden ser mucho peor.
|
2 |
|
||
Ánimo, y a mejorarse... |
3 |
|
||
Me alegra leerte de nuevo. Y como diría el personaje de Arguiñano en Airbag: Opérate. O no. O yo qué sé :-) |
4 |
|
||
No se si te imaginarás quien soy pero en el fondo no soy mala persona, me he enterado de lo que te pasó y bueno como sé donde escribes y llamé, me lo dijeron, espero que te mejores y que te recuperes cuanto ántes.
|
5 |
|
||
Joer. Ese doctor es peor que un Sistema Experto programado en BASIC... |
6 |
|
||
Vaya, cada vez estoy más dispersa y no me había enterado de nada.
|
7 |
|
||
Pero Joma, hombre, ¿qué te ha pasado?
|
8 |
|
||
Joer, pues yo tampoco sabía nada...
|
9 |
|
||
Es bueno leerte otra vez. |
10 |
|
||
Decidas lo que decidas, cuídate. |
11 |
|
||
Me alegro de leerte de nuevo. Sólo te puedo aconsejar que no te fíes de una sola opinión, si lo haces puede significar varios meses perdidos mientras pensabas que estabas tratándote correctamente.
|
12 |
|
||
jomaweb,
|
13 |
|
||
Bueno, leí tu anterior post, pero no pensaba que fuese para tanto, lo entendí mal :-)
|
14 |
|
||
Como te comenté en el anterior post, el del zurriagazo, un compañero mío estaba en una situación parecida a la tuya. Si te debes operar o no lo vas a saber, todo depende si el hombro se queda en su sitio o le da por salirse, al principio de vez en cuando, después de forma más continua, como le pasó a él. Entonces será obvio que hay que pasar por quirófano. Desde luego a mi compañero al final se le salía con un soplido.
|
15 |
|
||
Enhiro, tipos de lesiones en el hombro debe de haberlas a patadas.
|
16 |
|
||
Hola colega, me he luxado la clavicula , practicando aikido.¿es parecido a tu lesión?
|
17 |
|
||
Ivan, lo mio fué una rotura de ligamentos claviculares provocado por una caida. Realmente la luxacion es un estiramiento brusco pero no llega a rotura.
|