VELOCIDAD DE ESCAPE
2004-07-18
Un hombre que se supone que es conocido por algo que desconozco afirma con contundencia: "un hombre debe de tener carácter".
Y las asociaciones de ideas vienen y van. La cabeza es un artilugio muy curioso que tiene la tendencia a ir por donde le da la real gana. Mucha razón tienen las tradiciones orientales cuando dicen que el hombre que no es capaz de dominar su propia mente nunca será capaz de dominar a nadie.
Filosofías aparte, conocí a un hombre de mucho carácter. Derrochaba carácter por todos sus poros. De aquella generación perdida que no tuvieron más escuela que la vida, arrojados a la calle para ganarse su pan y el de su familia en una España que empezaba a despuntar tras largos años de dictadura.
Con los pocos recursos que dieron una educación escasa y unas opciones limitadas levantaron un hogar de la nada. De esos hombres cuya única idea era que su familia no pasara necesidad.
Este hombre que conocí, era de aquellos que te trataban siempre con respeto y educación. Y de aquellos que eran insultados diariamente por su mujer.
De aquellos que no podían quejarse, que no podían hablar, que no podían moverse. De aquellos cuya única libertad es el trabajo porque es el único sitio donde son valorados por baja que sea su función.
Un hombre de carácter que a pesar de estar gravemente enfermo debía seguir soportando insultos y humillaciones de las arpías a las que mantiene. "Los hombres son unos quejicas", "los hombres no valen para nada, si tuvieran que parir...", son frases que tiene que soportar pese a una gravísima dolencia.
Sí. Puedo decir que conocí a un hombre de carácter.
Con el suficiente carácter para contenerse, para aguantar y resistir una vida que cualquier otro consideraría insufrible. Otros muchos en su lugar serían capaces de cualquier barbaridad.
CARÁCTER
De un canal a otro. En uno de esos momentos tontos que tienes un fin de semana viendo la televisión a falta de ganas para hacer otra cosa.Un hombre que se supone que es conocido por algo que desconozco afirma con contundencia: "un hombre debe de tener carácter".
Y las asociaciones de ideas vienen y van. La cabeza es un artilugio muy curioso que tiene la tendencia a ir por donde le da la real gana. Mucha razón tienen las tradiciones orientales cuando dicen que el hombre que no es capaz de dominar su propia mente nunca será capaz de dominar a nadie.
Filosofías aparte, conocí a un hombre de mucho carácter. Derrochaba carácter por todos sus poros. De aquella generación perdida que no tuvieron más escuela que la vida, arrojados a la calle para ganarse su pan y el de su familia en una España que empezaba a despuntar tras largos años de dictadura.
Con los pocos recursos que dieron una educación escasa y unas opciones limitadas levantaron un hogar de la nada. De esos hombres cuya única idea era que su familia no pasara necesidad.
Este hombre que conocí, era de aquellos que te trataban siempre con respeto y educación. Y de aquellos que eran insultados diariamente por su mujer.
De aquellos que no podían quejarse, que no podían hablar, que no podían moverse. De aquellos cuya única libertad es el trabajo porque es el único sitio donde son valorados por baja que sea su función.
Un hombre de carácter que a pesar de estar gravemente enfermo debía seguir soportando insultos y humillaciones de las arpías a las que mantiene. "Los hombres son unos quejicas", "los hombres no valen para nada, si tuvieran que parir...", son frases que tiene que soportar pese a una gravísima dolencia.
Sí. Puedo decir que conocí a un hombre de carácter.
Con el suficiente carácter para contenerse, para aguantar y resistir una vida que cualquier otro consideraría insufrible. Otros muchos en su lugar serían capaces de cualquier barbaridad.
Estupidiario y otras cosas | jomaweb | 0 Comentarios | Enlace
Referencias (TrackBacks)
URL de trackback de esta historia http://jomaweb.blogalia.com//trackbacks/20277