VELOCIDAD DE ESCAPE

2003-09-13

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¿CRISIS EDITORIAL O FIN DE CICLO?

Gracias a informaciones de algunos amigos que trabajan en el sector editorial me he enterado de que la venta de libros en españa ha sufrido una caída bastante grave hasta el punto de que muchas colecciones están retrasando sus títulos previstos para este verano hasta la esperada "reactivación" de ventas que se produce en Navidades. Vamos, que en Navidades el público se vuelve tan loco que compra hasta incluso libros. Adonde vamos a llegar. ;P

El caso es que desconozco suficiente del sector editorial como para no saber si se trata de un ciclo coyuntural o una crisis en toda regla pero en lo que a mís gustos respecta considero que desde hace un periodo de tiempo relativamente largo no hay dios que encuentre en las librerías un libro apetecible que echarse a los ojos. Hablo naturalmente, de Ciencia Ficción.

Si en otro post anterior comentabamos la inevitable tendencia de la CF a diluirse en lo que se denomina el "Mainstream" o corriente general de la literatura, con lo que pierde su razón de ser, esta vez se trata de algo más grave.
Algunas voces lamentan la avalancha de Fantasía Tolkeiniana que está arrasando con la poca CF que existía en las estanterías e incluso Spider Robinson ruega, en tono casi religioso, por la vuelta de la era dorada.

El problema del argumento de Spider Robinson es que lleva implícito en su discurso el germen de su conclusión pero no la lleva a sus últimas consecuencias:

My genre has always had its ups and downs, but this is by far its worst, longest downswing. Sales are down, magazines are languishing, our stars are aging and not being replaced.


Los autores clásicos van desapareciendo y no hay jóvenes que tomen su lugar. En otras palabras, vamos de culo y contra el viento.
Yo soy más presimista que Spider Robinson. Si no hay relevo generacional no hay futuro, ni en la literatura ni en la vida ordinaria. Y la CF no tiene futuro.
Cuando un libro como Harry Potter y el Cáliz de Fuego recibe el premio Hugo del 2001 creo que ya estamos ante la confirmación de un hecho: los Hugo han aceptado la muerte de la CF como género.
Gente como Isabel Allende publican libros titulados "la ciudad de las bestias" o "el reino del dragón de Oro" donde monjes budistas, guerreros y aventureros buscan bestias mitológicas, en lo que parece ser el típico movimiento de "aprovechemos-el-filón".
Y la cosa va a peor. en nuestro país colecciones como Gigamesh o la Factoría publican cada vez más libros de Fantasía llegando en algunos casos (Gigamesh) a superar a los que en principio eran el objetivo de la colección.

Con la cabeza un poco fría hemos de aceptar un hecho que en muchos manuales de Historia de la literatura aparece meridianamente claro: la Ciencia Ficción es un género que se desarrolla en plenitud en Estados Unidos cuando convergen una serie de hechos: el desarrollo económico de la posguerra con su fé infinita en la tecnología, la guerra fría y la era espacial.

Uno a uno esos tres factores han ido desapareciendo.

La caida del muro de Berlín certificó la muerte del primer factor, revelándonos lo que a determinados ojos avispados era evidente: una economía capitalista libre es muchísimo más poderosa que una economía capitalista dirigida por el estado.

La era espacial, heredera y en muchos casos dependiente de las grandes inversiones de la guerra fría, frustró todas nuestras optimistas esperanzas al reducirse a un simple envío de robots a planetas en los que se planteaba tener bases humanas permanentes no muy lejos en el tiempo de las fechas en las que ahora vivimos. Ahora nos sentiremos felices si simplemente no cancelan los vuelos del transbordador espacial y alguna vez hay una estación en el espacio. (los desastres recientes no son ajenos a este recorte en las inversiones).

La fé infinita en la tecnología se ha reducido a un simple consumismo desaforado de "Gadgets" tecnológicos. Ya no queremos saber cómo funcionan las cosas, solamente queremos tenerlas. Y el ciudadano medio hace buena la tercera ley de Clarke:

"cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia"

La Ciencia Ficción nos hacía tener esperanza en que la humanidad vencería las supersticiones y el irracionalismo, inaugurando una verdadera edad de oro de la mano de la tecnología.

No será así.

Al menos de momento.

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